Tomar medicamentos ante la presencia de un dolor o malestar es necesario para poder lidiar con situaciones poco agradables para todos. El tema está cuando el dolor desaparece y la persona, pese a sentirse bien, no deja de tomar los remedios.
El consumo de remedios da lugar a un alto riesgo potencial de dependencia constante de cerca del 8%. Aproximadamente un millón de personas toman demasiados remedios y en muchos casos no están recetados.
Hay una tendencia muy marcada de la gente a la automedicación y no lo reconocen como una adicción cuando realmente lo es.
El hecho de que un medicamento sea recetado por un
médico y vendido por un farmacéutico no significa que uno lo tiene que tomar como hábito de consumo el resto de su vida. ¿Porqué? por varias razones, primer porque el remedio fue recetado para una enfermedad o síntoma en especial, segundo porque como todo la dosis recomendada cumple su ciclo, en la mayoría de los casos, y ese dolor desaparece y si se sigue tomando pesa a eso se pueden generar nuevos malestares.
Fuente: Narcóticos Anónimos
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